domingo, 5 de enero de 2014

Capítulo 2 - Sammy

 Nunca sabría por qué recordaba  que cuando me cansé de estar en la biblioteca y decidí que ya era hora de enfrentarme a mi familia, recordaba a un chico. Nunca había tenido demasiada buena memoria, por eso me sorprendía recordar a aquel chico que me miró cuando me levanté y al que dirigí una mirada burlona. Era alto. Su piel era clara y contrastaba a la perfección con su cabello castaño y sus ojos claros. Tenía unos ojos preciosos, azules, con largas pestañas. Me observaba fijamente y, aunque debería de haberme sentido cohibida, le aguanté la mirada. Noté como examinaba mi ropa de manga larga e, inconscientemente, me froté el brazo a través de la tela. Nunca le había hablado a nadie de los cortes, ni pensaba hacerlo. Lo máximo que era capaz de hacer era contarlo en el blog, a unos desconocidos que no veían mi rostro ni yo veía el suyo. Era mejor que nada, al menos.
En la calle, hacía un calor asfixiante. Suspiré. Me apetecía remangarme pero no quería recibir miradas de pena de la gente que se fijara en las cicatrices y los cortes recientes. Si había algo que odiase, era la compasión. En  el fondo, los comprendía. La sociedad era así.
No estaba demasiado lejos de mi casa. Saqué las llaves y encendí el móvil. No me sorprendió ver que no tenía ninguna llamada ni ningún mensaje. Todavía seguían enfadados conmigo y no había nadie más que se pudiese “preocupar” por mí. Abrí la puerta. Entré en la casa. Me quedé en el umbral, escuchando. Sorprendida ante tanto silencio, entré.
Registré las habitaciones. No había nadie. Suspiré. No me habían dejado ninguna nota a la vista. Entré en mi habitación. Me quité la sudadera. Me sentía como un pollo asado. Me puse una camiseta de manga corta. No me gustaba llevar los brazos al aire aunque estuviera sola pero esa vez hice una excepción.
Fui a la cocina y cogí algo para comer y un zumo frío de la nevera. Volví a mi habitación y me tiré en la cama.
No tenía ganas de hacer nada, sólo de dormir. A menudo, tenía que obligarme a mí misma a hacer cosas, hasta los actos más simples habían llegado a suponer un increíble esfuerzo para mí. Suspiré. Encendí mi ordenador para poner música, no demasiado alta. Luego, me tumbé en la cama y empecé a dibujar. Al principio, sólo hice unos garabatos sin sentido pero terminé por dibujar un ángel. Era un ángel de expresión abatida. Sus alas estaban rotas y caían, lánguidas, a la espalda. En la mano, sostenía un cristal afilado y, de sus muñecas, goteaba una sangre que eliminaba toda la pureza e inocencia que el blanco reflejaba.
Guardé el dibujo en el interior de la libreta y, sin pretenderlo, me quedé dormida.
Cuando desperté, era de noche. ¿Había dormido toda la tarde? Sí, eso parecía. Suspiré. Me puse una chaqueta y me peiné. No creía que estuviera sola a esas alturas.
Pero, otra vez, volvería a sorprenderme. Seguía completamente sola. Decidí darme una ducha, cenar temprano y volver a encerrarme en la habitación.
Me duché y me vestí, invirtiendo una cantidad exagerada de tiempo en todo. También cené. Seguía sola.
Era demasiado temprano para que alguien creyese que estaba dormida (padecía insomnio, por lo que nunca me quedaba dormida hasta altas horas de la madrugada) pero no me importó demasiado. Me metí en la habitación y dejé la puerta arrimada.
Horas después, escuché como la puerta principal se abría, dando paso a mis progenitores. 

3 comentarios:

  1. I'm pretty similar to Sammy :/...

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  2. Este capítulo ha sido el que más me ha gustado de Sammy hasta ahora ^_^
    Está muy bien, aunque creo que hay comas que sobran en algunos sitios y hay una cosita, un detallito sin importancia que me ha dejado un poco confusa. Cuando Sammy le lanza una mirada 'burlona' a Evan. No conocemos lo suficiente al personaje, pero yo tenía entendido que ella era como...¿tímida? O mejor dicho ¿anti-social? Algo por el estilo. Es una tontería, pero se me hizo extraño que hiciese eso a un chico que no conoce. Pero quizá Sammy es diferente a cómo la había imaginado y su personalidad es así de burlona, así que mejor me callo jajaja
    Buen capítulo.
    ¡Un beso!

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  3. Me encanta Sammy y la comprendo muchísimo así que sí... es mi preferido de los dos. A ver como se desarrolla todo pero como la matéis os mato yo xD

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